Quien tiene un buen plan tiene un tesoro
Laia Dalmau, consultora de Recursos Humanos - Comunicación, Cultura y Experiencia Colaborador en Cofidis España.
Grandes presupuestos gestionados por equipos numerosos…Todos alineados bajo una gran estrategia construida directamente pensando en el impacto en las personas y en el negocio, y en el que se miden los resultados estrictamente en datos.
Esta no es, en la mayoría de los casos, el origen o la realidad de la comunicación interna de las empresas españolas. A menudo nos encontramos con equipos reducidos, que deben convencer a la organización de la importancia de la coherencia en los mensajes, la transparencia o mostrarse próximos a los colaboradores. Equipos de comunicación, muchos de ellos formados por dos personas, que piensan en el día a día y que cumplen con su función para que la información fluya entre los equipos.
Pero si los recursos se centran en el día a día ¿quién piensa y traza algo tan importante como el plan a largo plazo? ¿en qué momento paramos y decidimos qué información debemos crear o construir, para que nuestros empleados sientan lo que deben sentir? ¿quién es el garante de nuestro futuro en términos de comunicación estratégica?
Sí, hablemos de visión estratégica en Comunicación Interna. Pasemos de hablar de ‘informar’ o ‘compartir’ para poner encima de la mesa el ‘crear entornos que favorezcan’ un buen lugar en el que trabajar. Creemos cultura.
¿Y cómo se hace esto de crear cultura? Preguntan algunos. He ahí la gracia de nuestro oficio.
En mi humilde opinión todo parte de la famosa escucha, para saber, por un lado, en qué punto estamos. Qué sienten nuestros colaboradores y qué les gustaría sentir. Cuál es su experiencia de empleado actual.
Por otro lado, entender muy bien cuál es el futuro de nuestro negocio, y qué tipo de equipos va a necesitar para dar respuesta a nuestra evolución como organización.
A partir de ahí, el objetivo es hacer encajar los dos polos manteniendo la balanza en equilibrio, a través de herramientas sean de comunicación, de liderazgo de nuestro management, de reconocimiento o de celebración. Potenciando el orgullo, trabajando el empowerment de los equipos y creando mucho, mucho debate interno. Sin miedo, con transparencia y sobre todo con buena voluntad.
No es cuestión de inventar la rueda, eso se hizo hace muchos años... sino permitir que la rueda gire y engrasarla bien para que no se pare. ☺
Debemos trazar bien nuestro plan, compartirlo para que todos lo conozcan y mantenerlo siempre abierto a modificaciones que permitan equilibrar la balanza entre negocio y experiencia del empleado.
Laia Dalmau es consultora de Recursos Humanos - Comunicación, Cultura y Experiencia Colaborador en Cofidis España.